Cuadernito y neceser floral

¿No os parece que ya casi es primavera? Todavía falta un poco, pero en mi terraza empiezo a ver alguna que otra florecilla. Hay que tener paciencia, y mientras tanto, rodearse de otras flores que abundan en las telas, las cintas y los botones ¿qué mejor que unas labores bien floridas? Ninguna es reciente, pero ahí van como avance de la primavera.

 

La primera, un pequeño cuadernito acompañado de un marcador de páginas. Los bordados a punto de cruz son de Christiane Dahlbeck, aunque he cambiado un poco los colores para que me coincidieran con los de la cinta. La libreta es una sencilla con las tapas de kraft, tanto el bordado como los botones y las cintas están pegados directamente encima ¡me encanta la combinación de rosa con verde!

 

 

 

 

Experimentando el año pasado con la tela de corcho hice este neceser, añadiendo tela japonesa. El tirador de la cremallera es una flor acolchada que recorté de la misma tela.

 

Mi última flor es "country", la hice junto con todas mis compañeras de viaje el año pasado para ir al festival de patchwork de Sitges. Es de fieltro de lana, y en su momento la usamos como broche, cada una con su combinación de colores favorita. Como es un poco voluminosa, ahora la gasto como alfiletero, es muy alegre.

 

Besos y hasta la próxima semana.

Monedero puck

El puck es el "proyectil" que se usa en hockey sobre hielo y hockey sobre patines. Mi hijo es jugador de este último desde los 5-6 años (y ya tiene 13), y a mí desde que lo veo jugar me entraban ganas de convertir un puck en monedero, porque él suele llevarse algo de dinero para tomar algo cuando acaba de jugar o cuando va a ver un partido. Hace varios años hice un intento bastante lamentable que acabó en la basura, pero creo que esta vez lo he conseguido aproximadamente.

 ¿Qué os parece?

El hockey sobre patines en línea es un deporte muy dinámico, muy emocionante y entretenido de ver. Bueno, al menos esa es mi opinión ya que soy fan total de mi jugador favorito y sus compañeros.

El puck auténtico se desliza tan rápido que a mí me ha costado años ser consciente de que alguien había marcado un gol ¡lenta que es una!. En todo caso, espero que la afición le dure a Héctor muchos años, así como los amigos que ha conseguido en todo este tiempo.

Una bolsa irrepetible

Y digo irrepetible por que no es verdad que no sea posible reproducirla cuantas veces se quiera, ya que compré el patrón (en Naaikamertje por cierto). Es porque no tengo intención (al menos en una laaaaarga temporada) de repetir semejante tortura para mis dedos, mi paciencia y mi pobre máquina de coser, que por lo general hace lo que le pido con mucha diligencia pero que para coser telas impermeables es como de la señorita Pepis...

Pues aquí tenéis, una bolsa de aseo para colgar que le hice a Héctor el mes pasado que me costó Dios y ayuda aunque en un principio parecía que iba a ser un trabajo laboriosillo pero fácil ¡en qué estaría yo pensando!.

Estoy contenta por tres razones: 1) y principal, porque la he terminado, 2) porque creo que ha quedado muy mona y 3) porque le hacía falta.

La he hecho con tela laminada por dentro y por fuera, y quizá ese ha sido el error: que había puntos donde debían acumularse hasta 5 capas de tela, y por más que apliqué todos los trucos conocidos para coser tela laminada, la máquina no cosía sino que daba saltos (incluso se partió una aguja). Así que como retirarme de una batalla no es lo mío, opté por rematar todo a mano (os imaginaréis como quedaron mi dedo del medio y algunas de mis uñas, yo que soy incapaz de mantener un dedal puesto más de 5 minutos). De ahí que si algún lustro de estos me da por volver a hacerla, será en algodón normal y como mucho un interior laminado. Y si se moja, pues ya se secará ;))). Tengo que aclarar que la culpa no es para nada del patrón, que está super bien explicado y muy detallado con fotos.

Bueno, basta de llorar y aquí tenéis los detalles. La tapa frontal que se abre del todo y permite colgarla, con un bolsillo interior cerrado con cremallera:

Los bolsillitos interiores, rematados con elástico (otro horror más):

  

El acabado exterior, con un gran bolsillo. No sé si apreciáis la recia consistencia de las telas, sobre todo la exterior, tan mona ella ;)))

 



Y ya con todo su relleno puesto:

¡Hasta nunca, objeto infernal! Espero que llegues a vivir muchos años.

Mi bolso Sgt. Peppers

¡Por fin terminado mi mega bolso precioso y maravilloso! Me hacía mucha ilusión tenerlo ya y me ha costado varios meses de hacer, porque por en medio ha pasado la Navidad y ya se sabe que una se lía sin querer... Pero ya lo tengo listo para estrenar en alguna salida de fin de semana (para mí es demasiado grande para usarlo todos los días). Es el modelo Sgt. Peppers, hecho con el estupendo tutorial que vende Mami Garrido, de "Cose y calla". Aunque el bolso tal y como ella lo ha diseñado es muy bonito, yo no soy muy fan de la estética pop, me gusta más el estilo campestre y romántico, y así he hecho mi versión:

Lo empecé en octubre, y en noviembre compré en la Feria Creativa algunos materiales que me hacían falta, como la boquilla tubular invisible super grande y las anillas cuadradas. Las telas, de algodón rústico y algodón para patchwork, ya las tenía en mis cajones esperando una ocasión especial, que siempre acaba llegando.

Quería que el bolso estuviera todo acolchado, y casualmente encontré en la web este motivo para acolchar a base de pájaros, que le va perfectamente a los motivos del estampado. Es la primera vez que acolcho algo por toda su superficie, en lugar de seguir líneas rectas en paralelo a las costuras.

Lo que ocurre es que no tengo pie para acolchar a máquina y me gusta menos como queda la puntada, por lo que empecé a acolcharlo a mano, y eso es lo que más me ha costado porque el bolso en sí no es complicado de hacer. Pero no puedo estar más contenta con el resultado.

Como adorno, en la parte delantera he puesto esta guirnalda bordada a punto de cruz sobre lino blanco con mi inicial en el centro, combinando dos gráficos y adaptando los colores propuestos a los de las telas que iba a utilizar.

Y en la parte trasera este pequeño panel de algodón estampado de una serie de pájaros que compré en Aliexpress, lo elegí porque queda muy retro y también por los colores.

Aquí podéis ver el interior, super amplio y con un pequeño bolsillo. Además como la boquilla se abre totalmente deja mucho espacio para acceder al contenido.

Y por último, estos adornos que he colgado de un imperdible en la parte delantera del bolso: cintas de diferentes colores y dos pájaros hechos con un patrón gratuito que ofrece Tilda en su blog, se llama "Christmas birds".

 

¡Ah!, y unas patitas metálicas en la parte de abajo, para que la base apoye en el suelo si hace falta:

 



¡Creo que lo voy a sacar de casa aunque sea vacío! ¡Me encanta! Y agradezco a Mami Garrido sus claras explicaciones y su diseño, que además de bonito resulta muy versátil y deja lugar a lo que se te pueda ocurrir para personalizarlo.