Aquí tengo una cosa que no había probado a hacer con una
boquilla metálica: un monedero de patchwork. Hay que decir que no lo hubiera
hecho por voluntad propia, sino solo porque me lo ha pedido Lucía, ya sabéis
que no domino el coser y que las cosas pequeñas me alteran un poco el
ánimoooo... El resultado ha sido un tanto defectuosillo pero no tan terrible como cabía esperar de la
operación.
Como siempre, me ha servido para aprender qué no debo hacer la
próxima vez, y también qué sería aconsejable (por ejemplo, consultar con mi
madre o en su defecto algún tutorial de patchwork). Pues aquí está el nuevo monedero de Lucía, con los colores
que a ella le gustaban:
Es una monada. BESICOS.
ResponderEliminarMuchas gracias
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