Antes y después V

¡Al fin! Esto era un UFO en toda regla, ocupaba un espacio nada despreciable y además mirarlo me producía angustia y arrepentimiento a partes iguales. Un año que debía estar muy aburrida le cogí a mi madre este costurero y graciosamente me ofrecí a hacerle una reforma.

 

Un objeto polvoriento y lleno de trastitos que a mí me pareció que se arreglaba en un pispás. ¡Con lo poco que me gusta pintar! Y así estuvo, a medio pintar durante una eternidad...

Estos días pasados hice un ejercicio supremo de autodisciplina y ¡aquí tenéis!. Bonito, ¿eh?

Quitar las telas interiores (no os podéis imaginar cómo de bien grapada puede llegar a estar una tela), pintura blanca, nuevas telas interiores (mucho más fácil ponerlas que quitarlas), pasamanería para ocultar las grapas y nuevos pomos de cerámica en colores de lo más primaveral.

Las fotos no son muy buenas, y no soy capaz de decidir si estoy muy contenta por cómo ha quedado o porque ya se lo he devuelto a su feliz propietaria ¡Por favor, que alguien me de un martillazo si se me ocurre otra vez hacer bricolajeeeeeee!

Cojines nuevos

Como tengo varias labores empezadas y ninguna terminada, os voy a enseñar los cojines nuevos que hice este verano pasado para empezar el curso. Los hice con diversas telas estampadas en tonos grises, turquesa y agua, porque cambiamos la tapicería de los sofás, la pintura de las paredes y, claro... no se podía quedar ahí la cosa y había que poner un poco de color cambiando de paso las fundas que llevábamos años viendo en colores rosa y verde. 

Después de un chorro de años, es así de fácil dar un cambio a la decoración solamente cambiando el color de lo que ya tienes. Y además tienes unos cuantos ratos de diversión:

Un kindle primaveral

¡Una primavera muy variada, como debe ser! Viento huracanado, frío, calor, nieve, lluvia... ayer un tiempo totalmente otoñal, hoy parece que con sol y más apacible. Mientras atravesamos esta caprichosa estación, nos quedaremos con los símbolos que mejor la caracterizan y más me gustan: las flores y los conejos ;)).

Con una colección de telas de esa temática que tenía guardada desde hace tiempo le he hecho una funda para el Kindle a mi sobrina, utilizando el patrón que yo misma me hice para esta otra de aquí.

Parece que este tipo de e-book ha cambiado de modelo y por tanto ya no es fácil encontrar la funda para el anterior. Y aunque lo fuera, ¿no es mucho mejor una personalizada y bien alegre?

Por si alguien se encuentra con el mismo problema o quiere hacerse la funda de Kindle ideal, os pongo a continuación las medidas y materiales que yo he utilizado. No he hecho fotos del paso a paso, pero intentaré explicarlo de la mejor manera posible.

Para el exterior:

- 2 x 12,5 x 17,5 piezas de entretela gruesa y dura, tipo fast and fuse.
- 2 x 12,5 x 17,5 piezas de tela exterior.
- 1 metro de biés o tela que nos guste cortada al biés.
- 2 x 20 cm de cinta para hacer el cierre.
- 17,5 x 3 de la tela interior, para el lomo.
- entretela adhesiva 17,5 x 3 también para el lomo

Para el interior:

- 2 x 12,5 x 17,5 piezas de tela interior.
- 9 x 28 de la tela exterior para la pieza que sirve para meter la mano.
- 7 x 12,5 de guata adhesiva fina.
- 4 x 6 cm goma plana en un color a tono con las telas elegidas.
- 17,5 x 3 de la tela exterior, para el lomo.
- entretela adhesiva 17,5 x 3 también para el lomo

Para hacer el exterior planchamos la entretela adhesiva a la tela del lomo. También plancharemos las piezas de fast and fuse a las piezas de tela exterior, esto serán las tapas de la funda. Coseremos las tapas al lomo, una a cada lado, para obtener un rectángulo de aproximadamente 17,5 x 27,5 cm.

El interior es algo más trabajoso pero sencillo. Primero haremos la pieza para meter la mano. Para ello planchamos la guata adhesiva sobre la mitad del rectángulo de tela de 9 x 28. Lo doblamos derecho con derecho para obtener un rectángulo de 9 x 14, cosemos por todo el borde dejando un lado para darle la vuelta, lo giramos, lo planchamos y cerramos esa abertura a punto escondido o pasando un pespunte por todo el borde del rectángulo. Este rectángulo lo coseremos centrado en una de las tapas con los lados estrechos arriba y abajo, cosiendo tres líneas paralelas solo en la parte de arriba y en la parte de abajo. Lo veis en esta foto:

Luego coseremos el lado largo del lomo con el lado largo de esta tapa, que quedará a la izquierda.

En la tapa de la derecha hilvanamos los cuatro trocitos de goma en las esquinas, cada uno de los extremos a 3 cm de la esquina. Ahí encajaremos las cuatro esquinas del e-book. Las gomas deben quedar más o menos así:

Coseremos el lado largo que nos queda libre en el lomo al lado largo de esta tapa, que quedará a la derecha.

Luego pondremos la cara exterior con el revés mirando hacia arriba, y sobre ella la cara interior con el derecho mirando hacia arriba. Lo ajustamos todo muy bien, recortamos los sobrantes de goma y planchamos las tapas, porque el fast and fuse tiene adhesivo por ambas caras y recordad que lo habíamos planchado solo a las tapas exteriores. Así conseguimos una especie de sandwich rectangular pero con los bordes sin rematar. Para fijar el lomo coseremos tres o cuatro líneas paralelas verticales, de arriba a abajo, solo en la tira del centro, para que nos quede así:

Por último, pondremos los dos trozos de cinta de atar en el centro de los bordes largos y el biés por todo alrededor. Si nos gusta podemos redondear previamente un poquito los cuatro cantos, como hice yo, utilizando algo redondo como plantilla. Y ya está. A mi me gusta combinar la tela interior con la exterior, pero puede hacerse como cada cual prefiera, es decir, todo el exterior del mismo color y todo el interior también homogéneo. Para eso no es necesario hacer una tira especial para el lomo, se puede hacer todo el rectángulo continuo, con lo que necesitaremos 17,5 x 27,5 de tela exterior y lo mismo para la tela interior.

Feliz primavera a todas, contra viento y marea jajajaja.